jueves, 7 de junio de 2012

Relaciones Públicas Verdes


El Día Mundial del Medioambiente se celebró en Nicaragua y todo el mundo una vez más el pasado 5 de junio. La ocasión fue propicia para que empresas e instituciones públicas reiteraran su compromiso con la preservación del medioambiente. Como seguimiento a su estrategia de responsabilidad social corporativa, la minera B2 Gold  organizó un concurso de manualidades con material de reciclaje para estudiantes en la localidad de la Mina El Limón, departamento de León.

Por default, ya resulta usual en los programas de relaciones públicas de empresas incorporar iniciativas en pro del medio ambiente. Ahora, lo novedoso, es que trascendiendo la esfera de la responsabilidad social, una nueva visión de la comunicación organizacional y las relaciones públicas atribuye como  función de estas materias, el management de la comunicación ambiental. 

 

El especialista holandés en comunicación Cees van Riel es el propulsor de este nuevo enfoque, seguramente influenciado por la problemática del calentamiento global. En su libro, Comunicación Corporativa, plantea que la comunicación ambiental debe asumirse como “política instrumental dirigida a realizar la estrategia ambiental de la organización informando, convenciendo y motivando a públicos objetivos internos y externos, y asegurando su participación”

 

Según van Riel, “esto significa, por un lado permitir que los públicos objetivo contribuyan al cuidado ambiental dentro de la compañía y, por otro lado, establecer una imagen ambiental conveniente entre públicos objetivo externos, coordinando actividades de comunicación”. A partir de tales premisas, concluyo que contamos ahora con un nuevo campo de las relaciones públicas especializadas, las relaciones públicas verdes.

 

Desarrollar relaciones públicas verdes conlleva una responsabilidad crucial para los comunicadores organizacionales y relacionistas públicos, al incidir en las políticas de la organizaciones con la incorporación del componente medioambiente en los planes estratégicos de comunicación. Si hay esfuerzos en este sentido, la verdad son encomiables, pero en definitiva se debe emprender una campaña de sensibilización en el gremio de comunicadores y relacionistas públicos para promover la adopción de esta nueva función en la comunicación organizacional.

 

La verdad que incomoda de Al Gore es una realidad inminente que presagia la destrucción del ecosistema mundial. Ante esto, y en el ejercicio de una profesión solidaria, nos enfrenta el  reto de hacer relaciones públicas verdes efectivas que marquen la diferencia y contribuyan a salvar el planeta. Alea iacta est. La suerte está echada.

No hay comentarios:

Publicar un comentario